Juntos a ninguna parte

Una aproximación a las relaciones entre España y la República Popular China (1973-2005)

Resumen

En la última década se ha ido conformando un relato que pretende explicar la posición de desventaja de España, frente a otros países europeos, en la región de Asia Pacifico. Este discurso sitúa Asia, y China en particular, como una “nueva frontera” de la política exterior española subrayando que existe una política de Estado marcada por la colaboración público-privada, y con la que se estaría recuperando el tiempo perdido. En síntesis, se viene a decir, que el espectacular desarrollo de China y las excelentes relaciones existentes entre Madrid y Pekín, abren oportunidades que deben ser aprovechadas por las empresas como vía para mejorar la posición española en la región. Sin embargo algo falla en este modelo porque no parece existir un progreso sustancial en las relaciones hispano-chinas que permanecen ancladas, desde mediados de los noventa, en la sintonía política, el grave déficit comercial y la marginalidad en lo relativo a inversión directa e influencia cultural. El tema principal de este artículo es, más allá del discurso oficial, aproximarse a las causas subyacentes que explican la marginalidad de España en ese escenario.