Ernest Hemingway, Innovador de la Crónica Taurina en "Fiesta" (1926)
Resumen
El contacto entre culturas siempre se ha dado en la historia universal y lo caracteriza la complejidad que entraña llegar a conocer, por parte de quien es extranjero y viaja, aquél mundo donde no se ha nacido, ni se ha recibido la educación desde la infancia. Si a ello le unimos, para el ejemplo español, que alguien foráneo, además, pueda llegar a interiorizar y comprender, con pleno domino, las claves del funcionamiento de la tauromaquia, el acceso a algo tan íntimo, agranda la distancia de un posible entendimiento de lo ajeno.
Ernest Hemingway (1899-1961), uno de los mejores escritores del siglo XX, logró salvar esa barrera y asimilar la cultura española. Cuando llegó a España quedó prendado de la corrida de toros y de la cultura hispana, y convirtió en pasión vivir el espectáculo táurico. Vio toros, analizó su universo y escribió sobre ello. Aprendió el idioma y se sumergió en las costumbres españolas. Descubrió en la corrida grandeza y mítica. Narró su contenido con novedoso estilo, logrando reproducirlo con imágenes vívidas, cinematográficas y templadas, mediante una prosa concisa y extática.